El melanoma es el cáncer de piel que deriva de los «lunares» (lesiones melanocíticas) y se origina en el melanocito, la célula de la piel que nos da el color. Es una de las formas de cáncer más frecuente en adultos jóvenes, lo que genera un gran impacto social y años de vida perdidos.
Dado que un factor importante para el desarrollo de melanoma es la exposición a radiación solar, es que la fotoprotección o conjunto de medidas de protección que tiene como objetivo minimizar el riesgo y los efectos dañinos de la radiación ultravioleta, son muy importantes, transformándose de vital importancia el desarrollar comportamientos y hábitos de exposición solar saludables.
Los fotoprotectores que se utilicen deben ser de amplio espectro, esto quiere decir que tengan un efecto contra la radiación ultravioleta A y B y que logren una adherencia adecuada en cada paciente.
La sigla ABCDE, permiten al paciente y al dermatólogo identificar lunares que pueden ser atípicos o ser melanomas esta sigla incluye lo siguiente:
A: Asimetría, la mitad de un lunar no coincide con la otra
B: Bordes, borde irregular o poco definido
C: Color, más de dos colores
D: Diámetro, mayor a 5 mm.
E: Evolución, cambio en tamaño, forma o síntomas asociados (ejemplo, sangramiento, herida que no cicatriza)
Si te sientes identificado con alguna de estas clasificaciones no dudes en contactarnos y solicitar hora con uno de nuestros dermatólogos.